sábado, 21 de abril de 2012

Ironías

Yo no creo en los columpios que se mueven solos, ni en los pájaros que no cantan, ni en el sol que te ciega.
Yo no creo en las interrupciones a corto plazo y largo plazo, en las indeciones matutinas, en los llantos ahogados.
Yo no creo en los gritos en la ducha, en las pesadillas de secuestradores, criminales, asesinos. 
Yo no creo en las locuras por amor, en las marcas de nacimiento, en las cicatrices rojas.
Yo no creo en las palabras sabias, en las dudas, en la empatía ajena que nunca se manifiesta.
Yo no creo en los fantasmas del pasado, en las noches en vela, en las jaquecas emocionales.
Yo no creo en el viento que despeina mi alma, en la luna que mece los sueños de otros.
Yo no creo en el arte de confeccionar mentiras, en que nunca nadie olvide mi nombre