viernes, 13 de marzo de 2009

Día 13.


Me bombardearon los recuerdos nada más salir de la sala de operaciones.Se me hizo un nudo en la garganta y casi me ahogo.

Por suerte o por desgracia sobreviví.

Sentí mis entrañas revolverse entre arañazos y cicatrices y ¡joder! cómo dolía, que pensé que vomitaría el cadáver de ese órgano que bombea sangre sin parar porque ya no habría sitio para él en mi cuerpo. Acto seguido se me subió el desdén por el esófago hasta acomodarse en el paladar, dándome un sabor amargo que me recordó a las noches en vela de aquella primavera de la que tanto me costó salir con vida (que lo hice a duras penas y quizá porque encontré a mi pseudo-modelo a seguir que llevaba el mismo nombre que mi pena carcelaria)

Por suerte o por desgracia sobreviví.

Morir. Resucitar. Morir. Resucitar. Morir. Resucitar. Morir. Morir. Morir... Resucitar.


Cuando te has visto tan cerca del final y no ves a dónde agarrarte, lo haces, sin duda haces lo que sea por volver a resucitar.

(aunque sepas que no será para siempre)

(aunque sepas que la próxima muerte será más lenta y dolorosa)

(aunque sepas que jugarás con ojos de los que sí te fías, de los que te aprovechas cuando están cerrados o fingen estarlo)

(aunque le vendas tu alma al peor postor)

(aunque te cueste reconocerlo)

(aunque no aprendas nunca, siempre acabarás arrepintiéndote) Porque los parches se deterioran, se despegan de la piel, caen al suelo y al único que le duele la herida es a ti y no al parche.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Se me hace imposible no escribirte en esta actu. Me he sentido identificada sin saber por qué, sobre todo, por ese último parrafo que escribiste en el que dices que al que le duele la herida es a ti y no al parche.

He visto a la persona que era hace pocos meses ( y a la que casi siempre he sido) reflejada en ese texto.

Puedo asegurarte Lis, que se pasa. Todo pasa. Cualquiera te lo podrá decir. Pero a mi, que siendo tu amiga como soy y queriendote como te quiero, creeme.

Cada vez que siento ese dolor, lo primero que pasa por mi cabeza es que todo pasará, tardará más o menos, dolerá más o menos, pero pasará. Y tendrás la experiencia para próximas veces. Por que si, es una pena, pero lo volveremos a sentir en tiempos futuros, por que así es [b]la vida[/b], una sucesión de caidas que te enseñan a vivir.

Te Quiero, y siento mi parrafada.
Y no te lo he dicho, pero aqui me tienes si alguna vez necesitas a alguien con quien hablar ^^

Sara.

Dara dijo...

Resucitar, siempre, hasta con la última muerte, hasta con la que más duela.




miau, vasito de agua.